El Proyecto
de Reforma del Código Penal, aprobado en el Consejo de Ministros el
20/09/2013 resulta realmente preocupante por muchas cuestiones, algunas conocidas por todxs pero
otras de las que directamente no se habla como es lo que afecta a las
personas diagnosticadas de algún trastorno psiquiátrico, no se habla porque
sigue existiendo una estigmatización bestial hacia estas personas.
En 2012 realicé mi trabajo de fin de master acerca de salud mental
en el ámbito penitenciario, alarmada por cifras de la propia
Dirección General de Instituciones Penitencias que mostraban que
mientras para el año 2006 eran 182 las personas que se atendían en
el Hospital psiquiátrico penitenciario de Sevilla mientras que en
las cárceles comunes andaluzas el número de presos con
“enfermedades mentales” graves era de 1.120, de 5.600 si tenemos
en cuenta a todas las personas presas con algún “trastorno
mental”. Aunque en un trabajo tutorizado y para el que se pretende
aprobar todo un curso no pude enfocar el tema de la salud mental
desde el escepticismo que me suscita sí utilicé los numerosos
estudios que evidencian que el número de personas que desarrollan
dichas “enfermedades” dentro de la prisión es exponencial
(avalados incluso por la OMS, encargada de seguir engordando la lista
de estas “enfermedades” mediante la patologización de numerosas
conductas)
La
cuestión es que si partimos del supuesto de que la “enfermedad mental” existe no
se puede entender que el tratamiento que se ofrece a una persona
reconocida como enferma sea precisamente el que se ofrece desde
Instituciones Penitenciarias, algo que l@s
trabajador@s sociales llevan tiempo denunciando.
¿Qué
pasará cuando a la precaria situación en la que se encuentran estas
personas que se suponen enfermas y se encuentran custodiadas en
instituciones estatales que asumen -al menos sobre el papel- tanto la
función de reinserción social como la de rehabilitación y/o
conservación de la salud le sumamos lo siguiente?
-Se
equiparará
enfermedad mental con peligrosidad y se tipificará a la persona con
trastorno mental como Sujeto Peligroso.
-Actualmente,
una persona no puede ser condenada por un acto que no ha realizado.
Con la reforma ¡¡¡¡¡la presunción de posibles delitos será
motivo de condena!!!!!
-Ya
no habrá límite temporal a la reclusión en un centro psiquiátrico
como Medida de Seguridad. Una persona con un diagnóstico de salud
mental que ha cometido un delito, independientemente de la gravedad
de ese delito, puede permanecer en un centro psiquiátrico
indefinidamente, incluso de por vida.
-La
Libertad Vigilada se plantea también como perpetua.
-Toda
persona diagnosticada que se encuentre bajo libertad vigilada podrá
ser forzada a presentarse de manera regular y periódica ante un
médico, psiquiatra o psicólogo y a medicarse y ATENCIÓN esto ya no
dependerá de un criterio médico sino de un criterio judicial.
Si
esto no nos hace reflexionar porque somos parte necesaria para la
perpetuación de la estrigmatización de la “enfermedad mental”
quizás nos ayude pensar que 1 de cada 4 personas pasa, ha pasado o
pasará por lo que se considera un problema de salud mental a lo largo de su vida, según este
sistema y su definición de enfermedad mental tod@s
somos loc@s en potencia. Si aún no has empezado a reflexionar tal vez lo hagas si piensas en la multitud de
comportamientos que alguna vez han estado tipificadas como enfermedad
mental como puede ser la homosexualidad (y que aún son considerados
como tal en otras culturas) además al contrario de lo que se cree el número
de comportamientos susceptibles de ser considerados una patología
por la institución psiquiátrica crece día a día por lo que cada
vez es mayor el número de personas expuestas a los efectos
del nuevo Código Penal.
Loc@
es tod@ aquel/aquella que es diferente a lo que la sociedad considera
normal, loc@ es el que ríe cuando todo el mundo cree que solo hay
motivos para llorar, loc@ es el que canta bajo la tormenta porque no
tiene miedo a la lluvia, loc@ es quien no calla, quien cree que merece la pena ser quién se quiere
ser, loc@ es el que ve la vida de una forma que l@s
demás no son capaces de ver, quien cree que puede cambiar el mundo... y a veces es@ loc@ se puede volver
peligros@ exactamente igual que a veces se vuelve peligros@
aquel/aquella que se creía normal.
Más información:
http://www.todoporhacer.org/de-enfermosas-a-peligrososas-la-salud-mental-en-la-reforma-del-codigo-penal